La negociación y el diálogo han dado frutos. Los planes de cuenca presentados ayer por el Gobierno de España garantizan el trasvase Tajo-Segura en los próximos años y la inversión de más de 500 millones en infraestructuras en la provincia de Alicante, que deben permitirnos sentar las bases del agua para siempre en la Comunitat Valenciana. Las negociaciones del Consell de Ximo Puig han cristalizado en un primer paso “decisivo” frente a la intención inicial del Ministerio de Transición Ecológica, y ahora se abre un plazo para continuar negociando la mejora de las condiciones de este trasvase, que, como ha asegurado el president, “sigue y seguirá siendo irrenunciable”.

En concreto, la nueva norma establece un caudal ecológico de 7 metros cúbicos, una cifra que garantiza el trasvase en los próximos años frente a la propuesta inicial de 8,52 metros cúbicos por segundo, que habría implicado una seria amenaza para el mantenimiento del acueducto. De este modo, nuestros agricultores podrán seguir cultivando y los regantes, regando.

El nuevo plan sentará las bases del agua para siempre, además, con 500 millones de euros en inversiones en infraestructuras, como las previstas para ampliar la capacidad de la desaladora de Torrevieja o para la conexión de las canalizaciones para que ese agua llegue a los regantes. Asimismo, la apuesta por la energía fotovoltaica que recoge ese plan de inversiones abaratará el coste del agua que llega al campo valenciano.

Ahora, se abre un periodo de alegaciones en el que el Gobierno valenciano seguirá negociando con el Ministerio. Como ha asegurado el president Ximo Puig, el trasvase es “irrenunciable”, especialmente “mientras no esté garantizada por otras vías la cantidad de agua que necesitamos”. Por ello, ha manifestado que la Comunitat Valenciana “se mantendrá firme en la defensa de los regantes” y ha abogado por un “diálogo exigente”.

En este sentido, la Generalitat reivindica la “transición moderada” del caudal de reserva del Tajo-Segura, la convocatoria de una mesa de diálogo con los regantes para trabajar conjuntamente en las alegaciones al plan y, sobre todo, seguir en la vía del agua para siempre con inversiones e infraestructuras. “La huerta de Europa debe tener garantías absolutas”, ha manifestado el president, que ha asegurado que el Consell alegará el plan para buscar “soluciones desde el diálogo” y mantener “la máxima firmeza en la defensa de los intereses” de los regantes alicantinos.