Los valencianos y valencianas con una renta inferior a los 60.000 euros anuales pagarán menos impuestos. Es el anuncio del president y secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, durante el Debate de Política General, en el que ha presentado su reforma fiscal de la que se beneficiará el 97,4% de la población. Un total de 1,3 millones de contribuyentes disminuirán su presión fiscal con un ahorro total de 149 millones de euros a las familias y las clases medias y trabajadoras.

“Cuando los hechos cambian, la respuesta también lo hace” ha explicado Ximo Puig, quien ha señalado que “ahora es el momento de un ajuste fiscal basado en 3 pilares: ayudar a las rentas medias y bajas, fomentar la actividad económica y el empleo, y proteger a los que más castiga la inflación”.

Bajo esta premisa, el Consell ha elaborado una propuesta fiscal que pasa por una serie de acciones fundamentales. La primera es el aumento en un 10% de la cuantía exenta de tributación a toda la ciudadanía, lo que beneficiará a todas las personas que no superen los 60.000 euros de ingresos.

La segunda  medida pasa por una nueva tarifa autonómica del IRPF para este ejercicio, que se traduce en una ahorro importante para las clases medias y trabajadoras: las rentas de 10.000€ se ahorrarán 94,5 euros, las de 20.000€ se ahorrarán 117 euros , las de 30.000€ se ahorrarán 67 euros. Por su parte, las rentas superiores a 60.000€ mantendrán su esfuerzo tributario, con lo que se mejorará la progresividad del impuesto.

En esta misma línea, la tercera medida amplía todas las deducciones y bonificaciones fiscales y también amplía el número de personas beneficiarias.

PROGRESIVIDAD FISCAL

Ximo Puig ha destacado que esta “es la reforma fiscal progresista, la reforma fiscal para el 97,4 % de la población, que se traducirá en un ahorro medio de más de 100 euros por contribuyente y un ahorro global de 149 millones a las familias, y, de ellos, dos terceras partes benefician a las rentas inferiores a 30.000 euros”

“Unos bajan impuestos a los más ricos, aquí se ayuda a llegar a fin de mes a la mayoría de la sociedad. Aquí no tocamos el impuesto del patrimonio, por el que solo tributan el 0,5% de valencianos”, ha defendido el president.

Una respuesta contundente que enfrenta al populismo fiscal del Partido Popular. La propuesta planteada por el Consell de Ximo Puig sigue el principio de la progresividad fiscal, una característica vital para alcanzar la justicia social y que brilla por su ausencia en las medidas que propone la derecha.

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Mientras algunos partidos apuestan por bajadas indiscriminadas de impuestos, en contra de las recomendaciones europeas y de los organismos internacionales, y beneficiando solo a las clases altas, en la Comunitat Valenciana se ha impulsado una reforma fiscal desde la responsabilidad. Para garantizar que quienes más recursos tienen sigan aportando más a la caja común.